16.11.07

La era Antigua

La era Antigua

Las Razas:

En el pasado de Nosgoth, junto a los humanos, existían dos razas singulares más: Alados y Hylden, ambos con grandes poderes. Los primeros se caracterizaban por su pigmentación azul en la piel, sus alas de plumas negras y las terminaciones de sus extremidades: los brazos acababan en unas garras de tres dedos, mientras que los pies equivalían a sólo dos garras. Los Hylden poseían unas extensiones óseas en los laterales de la cabeza, su piel era de color verdosa. Aunque también poseían tres dedos en las manos y dos en los pies eran de forma distinta a la de los alados. También poseían alas, pero no plumíferas. Eran considerados criaturas de gran belleza física.


(En la primer imagen observamos a los Alados y en la segunda a los Hylden)

Primeros Acontecimientos:
os alados eran devotos seguidores del Dios Antiguo, el dios de la rueda de la vida al que todas las almas de Nosgoth acudían en un ciclo purificador de nacimiento, muerte y renacimiento.
Por los escasos testimonios que quedan en Nosgoth de esta época antigua, se conoce que los Hylden no quisieron someterse a la voluntad del Dios Antiguo y que por ello comenzó una guerra santa que enfrentó a ambas razas. Muchas fueron las batallas y numerosas las vidas que se perdieron, hasta que los alados (haciendo uso de su poder) exiliaron a sus enemigos a una dimensión demoníaca. De alguna forma los Hylden se hicieron inmortales al paso del tiempo, se desconoce si a consecuencia de entrar en esa dimensión o si fue esa inmortalidad, que encierra sus almas en sus cuerpos, lo que provocó la ira del Dios Antiguo y en consecuencia la guerra y el exilio. Sí es bien conocido que en aquella dimensión la belleza física de la que gozaban los Hylden se deterioró a puntos extremos. Para salvaguardarse de ellos, los alados erigieron los Pilares de Nosgoth (léase sección de Pilares para más información) como cerradura de la dimensión demoníaca, no sin antes recibir por parte de sus enemigos una maldición: El Don Oscuro (vampirismo).


El Vampirismo:
Conlleva una serie de cambios en los individuos afectados. La característica mas llamativa es la acusada sed de sangre, ya sea animal o humana. El individuo se ve obligado a alimentarse de ella para subsistir. Esto para los alados no suponía un problema grabe, lo realmente problemático fueron los dos siguientes cambios: inmortalidad y esterilidad. Hasta entonces un alado nacía, crecía y moría, como cualquier criatura. Ahora la población queda estancada, no pueden nacer más alados. La inmortalidad aprisionó sus almas en sus cuerpos sacándolos del ciclo purificador del Dios Antiguo, el cual retiró su favor de ellos y los abandonó. Sus cuerpos aunque capaces de regenerar sus heridas e inmortales al paso del tiempo, no podrían resistir todo tipo de heridas, de modo que se les podría dar muerte de un modo, esto es un factor que su Dios conoce y será decisivo en el desarrollo posterior de la historia.
Desesperados por esta situación comenzó un suicidio masivo de alados que quisieron entregar su alma al dios a cambio de su perdón, esto contrajo graves consecuencias. Al ser los pilares una creación alada, como se explica con anterioridad y en otras secciones, están ligados de forma muy estrecha al linaje sanguíneo alado. Por otro lado, aunque encerrados, los Hylden continúan siendo una amenaza ya que sus poderes abarcan la manipulación mental y pueden llevarla cabo desde dicha dimensión. Para evitar estas acciones es necesaria la presencia de una ligadura (el linaje sanguíneo mencionado con anterioridad). Cuantos menos alados mas débil es la ligadura y por tanto más facilidad de control para la raza exiliada.
Para evitar esa situación final, transmitieron el Don Oscuro a los humanos para continuar con su linaje. Así el primero de los vampiros de Nosgoth fue Vorador, creado de las manos del alado Janos Audron.

Buscando Otro Final
Paralelamente a esta serie de acontecimientos, los alados interpretaron a partir de unos signos una profecía. Signos que hasta ahora son desconocidos tanto en origen como en forma. La profecía señalaba la llegada de un héroe, un Mesías salvador que liberará a la raza alada. Este héroe profetizado portara un arma especial, una espada bautizada bajo el nombre de Segadora. Esta singular espada de gran poder fue forjada por el vampiro Vorador y posteriormente dotada por magia imbuida por los “otros” tal y como Vorador los nombra en Defiance y que nos lleva a pensar que se refiere a los alados, ya que forjó la espada a petición de Janos Audron. No fueron los Alados los únicos que profetizaron un héroe, sino que los Hylden también tenían un campeón que los sacaría de la dimensión demoníaca. Un héroe con ojos y espada llameante.
Hasta ahora y con la información de la que disponemos el análisis y valoración de la profecía se hace difícil dejando muchas lagunas sin explicar.



Batalla entre Héroes

Previo a Blood Omen
Continua el transcurso de la historia y debido a la ausencia total de nacimientos de alados o vampiros, los Pilares comienzan a elegir como guardianes a humanos. Los alados conocen que esta raza inferior fácilmente manipulable e ignorante de los hechos pasados, no son eficientes para servir como guardianes. Por ello desde el momento que un Pilar elige a un guardián, lo adoptan y educan para que al llegar a la edad madura le transmitan el don Oscuro. Dos guardianes humanos, Moebius (Guardián del Tiempo) y Mortanius (Guardián de la Muerte) se opusieron a los alados, reclamando los pilares como suyos. De este modo y desde entonces, los Pilares solo tuvieron guardianes humanos.



Revuelta de los Guardianes humanos

Bajo el mandato de Moebius se formo la orden sacerdotal guerrera de los Sarafan. El fin de esta orden era exterminar a los vampiros y alados de Nosgoth. Los seis generales de la orden (Raziel, Turel, Dumah, Rahab Zephon y Melchiah), armados con un cetro que debilita a los vampiros y alados, se adentraron en el refugio de Janos Audron, que aguardaba pacientemente la llegada de su Mesías para hacerle entrega de la Segadora. Dieron muerte a Janos, quitándole su corazón (con la capacidad de devolver la no-vida vampírica) y la Segadora. Poco después los Sarafan murieron en combate y fueron enterrados en la catedral de su orden con todos los honores. Quedando custodiado el Corazón de la Oscuridad y la Segadora en otra catedral, la Catedral del Averno.
En represalia del acto homicida contra su creador, el vampiro Vorador se adentró hasta el centro de la fortaleza Sarafan y asesinó a seis de los nueve guardianes. Sobreviviendo de ellos Moebius, Mortanius y Malek (Pilar del Conflicto). En respuesta a su ineficiencia para defender al Circulo de los Nueve (función que desempeñaba sólo el Guardián del Conflicto), Mortanius le maldijo encerrando para siempre su alma en su armadura. Los pilares se restauraron eligiendo nuevos guardianes humanos.
La Guardiana del Equilibrio de estos nuevos elegidos, Ariel, fue asesinada por una entidad oscura. Esto produjo que su amante (Guardián de la Mente) contagiara su locura a los demás guardianes corrompiéndolos, incluido al humano recién nacido Kain, sucesor de la guardiana del equilibrio.

* A partir de este punto, los acontecimientos que se desarrollan son los ocurridos en los juegos de la saga.